Luigi llevaba ya una semana fuera del hospital y decidió hospedarse con las hermanas Jansen en Delft. Allí estaba la hija de Alma y él esperaba que ella volviera, así se sentía más cerca.
Estaba muy confuso y no sabía qué decisión tomar. La carta de Alma le dejaba claro que no iba a volver, pero a la vez, él negaba la realidad.
- Bambino, te puedes quedar todo el tiempo que quieras aquí con nosotras-, dijo Lotte.
- Lo sé, sois mi familia, pero me desespero y la casa se me cae encima. Quizás si ayudo a encontrar al marido de Alma esto se acabe- dijo, Luigi.
- No creo que implicarte en algo así, sea buena idea, eso es cosa de la policía- respondió Meike, que escuchaba la conversación mientras daba de comer a Ana.
Luigi solo quería salir corriendo y decidió ir a comisaría para hablar con Tess.